No se ha descubierto para qué sirve el himen; quizá no sirve para nada
La virginidad no existe, es solo un término moral y la moral no nos ha servido para nada en la educación sexual, explicó la sexóloga Claudia Ofelia Velazco Amador, que en sus 18 años experiencia ha impartido talleres de erotismo, sexualidad para adolescentes y sexualidad para padres y madres.
La sexóloga, graduada de psicología y con maestrías en terapia familiar sistemática y en sexualidad, destacó que las diferencias entre cómo se vive la primera experiencia sexual son culturales, porque tradicionalmente la primera vez de un hombre era algo que se debía celebrar, que entre más pronto tuviera su primera relación sexual iba a ser mejor, y entre más tiempo se tardara iba a ser más criticado, mientras que no era así con las mujeres, aunque ya se han empezado a notar algunos cambios sobre cómo se percibe a pesar de que aún hay muchos tabús y castigos, criticas como “¿Por qué tan chica?, ¿Cuántas relaciones llevas?, si lo haces debe ser solo para complacer a tu pareja o solo si quieres tener hijos”.
Aclaró que, en el aspecto fisiológico, solo algunas mujeres nacen con himen, contrario al mito del sangrado en la primera relación sexual. No se ha descubierto para qué sirve el himen, quizá no sirve para nada, no todas las mujeres nacen con él y hay muchos tipos de himen, hay algunos muy resistentes, otros muy frágiles y no siempre se rompe en la primera relación sexual, puede ser en alguna masturbación o en alguna caída y no hay ninguna consecuencia si se rompe, solamente un pequeño sangrado, por lo tanto, la virginidad es algo que no se puede comprobar y por lo tanto no existe.
A las mujeres les aconseja que al tener su primera relación sexual deben estar seguras en todos los aspectos, desde lo físico, si su cuerpo lo quiere y está preparado, hasta en lo psicológico y mental, ¿cómo me voy a sentir, si es una experiencia agradable…? Y si no es lo que yo quiero ¿Qué tan preparada estoy para enfrentar eso? Mencionó, además, que no hay prisa, debería ser cuando cada quien decida y no siempre debe ser por amor, recalca que es bonito e importante, pero la realidad es que no siempre se va a amar a la persona que nos atrae, esto no quiere decir que seamos malas personas o que no tenemos valores, tiene que ver con la decisión que uno tenga. La higiene y la salud sexual son otros factores importantes para evitar el riesgo de embarazos o infecciones. El último consejo que proporcionó la sexóloga, fue no sentir culpa por haber tenido relaciones sexuales o por tener fantasías, tanto hombres como mujeres tenemos el mismo deseo y no es cierto que los hombres tienen más deseos que las mujeres, quizá solo un poco por las cuestiones hormonales, pero realmente no hay una diferencia.
Mencionó que la sociedad impacta mucho en este tema, ya que desde pequeños se nos da una educación sexual, al criticar y juzgar la vida sexual de otras personas. Si escuchamos que una chica de quince años resultó embarazada y escuchamos las críticas, crecemos con culpas e ideas de que embarazarte y tener relaciones sexuales es malo. Impacta totalmente lo social, familiar, la poca educación sexual formal que hay y las religiones, “sin meterme en tema de la religión, pero las religiones tienen muchos mitos y castigan en lo sexual” recalcó la sexóloga.
La sexóloga señaló también cómo afecta en la sexualidad el abstenerse de tener relaciones sexuales o no masturbarse, ya que así no nos conocemos, no conocemos nuestro cuerpo, no conocemos lo que nos gusta y lo que no nos gusta y no satisfacemos algo que nuestro cuerpo desea, desde que hay palpitaciones del corazón hasta cuando hay erecciones, por eso hay mucho remordimiento y culpa, ya que se nos impone que la masturbación es mala, y que no debemos tocarnos porque nuestro cuerpo es un templo, esto afecta porque no nos estamos satisfaciendo. Pone como ejemplo, que cuando se va a una secundaria y se les pregunta a los alumnos quien quiere tener hijos, muy pocos e incluso nadie quiere, pero cuando se les pregunta quien quiere empezar a tener relaciones sexuales sabiendo que no hay riesgo ni culpa, la mayoría levanta la mano.
La sexóloga recomendó que antes de tener la primera relación sexual haya masturbación; entre más seguros y satisfechos nos sintamos, más se alarga el tiempo de nuestra primera relación sexual con alguien más y entre más información y educación sexual tengamos, habrá menos infecciones por esta vía de transmisión y menos embarazos no deseados. Reparó, sin embargo, en que entre más impulsivo se vuelva el deseo de masturbarse, al dejar de convivir o hacer cosas importantes, hay que revisarlo y tratarlo en terapia.
Contexto en cifras
En México, el inicio de la vida sexual activa se sitúa entre los 15 y los 19 años, según el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), que complementa explicando que, aunque casi todos (97%) conocen al menos un método anticonceptivo; más de la mitad no lo usaron en su primera relación sexual y con datos de la Secretaría de Salud calcula que 17.4% de los nacimientos totales corresponden a mujeres menores de 20 años, de los cuales entre 60 y 80% no son planeados.
La edad mediana al inicio de la vida sexual de las mujeres es a los 17.5 años y 17.6 en Aguascalientes, según la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018 del INEGI,
El 98.0 % de los hombres reportó que el encuentro fue con una mujer y 2.1 % con un hombre. El 98.7 % de las mujeres dijo haber iniciado su vida sexual con un hombre y 1.3 % con una mujer, según la Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y de Género (ENDISEG) 2021.
La ENADID 2018 del INEGI también reporta que el 36.4% de las adolescentes que no usaron método anticonceptivo señalaron como causa que no planeaban tener relaciones sexuales, 17.3% manifestó desconocimiento de métodos, 16% deseaba embarazarse y 15.7% confiaba en que se embarazaría.
Para leer más…
Aún en el siglo XXI hablar de sexualidad en las familias es un tabú. En comunidades rurales el inicio de la vida sexual, sobre todo para las mujeres, puede presentarse incluso antes de los 16 años de edad.
Aumentan embarazos en adolescentes de México. Cada año hay 340 mil embarazos adolescentes en México en menores a 19 años: UNAM.
Texto y fotos: Christian Santacruz e Idaly Itzamani Heredia Ramírez, segundo semestre de LCI.
Sobre el autor
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