Publicado en septiembre 26th, 2020 | por Carlos Olvera Zurita
¡Aguas Spoiler! “The Social Dilemma” te Hará Desear Dejar Instagram
No abundaré mucho en el tema pero me enojé con un amigo por preferir ir con otros amigos a la playa que conmigo, lo cual es cierto, sin embargo me resulta necesario admitir que me enteré de este hecho gracias a Instagram así que probablemente, si Instagram no existiera, no me habría dado cuenta de la traición.
Hoy, no les voy a mentir, siento un poco de arrepentimiento y no porque este pésimo amigo no haya sido un traicionero, sino porque el enojo no fue causado íntegramente por él ya que Instagram fue clave para generar ese horrible sentimiento, hecho del que me habría percatado de ver el contundente documental The Social Dilemma que recién se estrenó en Netflix para nuestro país.
The Social Dilemma nos presenta a varios ex trabajadores y desarrolladores de diferentes y populares redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, Google, entre otras; quienes decidieron abandonar los proyectos cuando se dieron cuenta que el rumbo que estaban tomando era negativo para la sociedad.
Tristan Harris quien funge como hilo conductor del documental trabajaba como diseñador ético de Google pero un día se dio cuenta que el modelo de negocios no solo es adictivo, sino que deshumaniza a los usuarios y utiliza sus sentimientos para venderles cosas; por lo que en secreto realizó una presentación para proponer a sus compañeros y jefes un cambio de enfoque, propuesta que en un primer momento fue tomada con agrado pero que con las semanas fue sepultada en el olvido.
Desde ese momento Harris, quien por cierto se parece a Calvin, decidió dejar de trabajar para Google y se dedicó a concientizar sobre los peligros de mantener el modelo que prevalece en las redes sociales sin mucho éxito, por lo que sus argumentos, compartidos con muchos otros desarrolladores que renunciaron, no llegaron a impactar hasta que Netflix lo volteó a ver; algo que francamente resulta por lo menos llamativo.
Y es que si algo tiene The Social Dilemma, además de su increíble capacidad explicativa, es su contundencia, porque aunque se me ha repetido en numerosas ocasiones que cuando un producto es gratuito, en realidad tú eres el producto; lo cierto es que no fue hasta que vi este documental que logré aterrizar e identificarme con la frase.
Si el entender que los usuarios somos un producto intercambiable y deshumanizado para las redes sociales logró sensibilizarme, la segunda parte del documental me aterró. The Social Dilemma, de repente deja de hablar de lo peligrosas que pueden ser las redes de manera particular y se adentra en el terreno de lo general al afirmar que activamente, Facebook, Twitter, Instagram y las demás, muestran a sus usuarios sólo lo que quieren ver a fin de segmentarlos y facilitar su venta.
Esta segmentación con fines mercantiles puede tener y está teniendo terribles consecuencias, pues el dividir a los usuarios y polarizarlos para que estén más dispuestos a compra, ha derivado en que las posturas sean más extremas y que las coincidencias por el contrario se desvanezcan, lo cual ha resultado en un suelo fértil para movimientos extremos que desafortunadamente no se quedan solo en el terreno de lo virtual, sino que han escalado a manifestaciones de personas que creen que la Tierra es plana, en personas que no quieren vacunar a sus hijos y otros más que piensan que el COVID es una mentira.
Aunque es difícil que las personas dejemos las redes sociales pues somos cada vez más dependientes de ellas, al final del día, The Social Dilemma nos recuerda que no todo lo que es oro brilla y que sobre todo, debemos ser más responsables de como las manejamos y del impacto que tiene cada cosa que compartimos y el peso que tiene cada like que damos; así que no se pierdan este impactante documental que se merece 4.5 estrellas de 5.