Publicado en mayo 19th, 2020 | por Locus

Jaime Humberto Hermosillo y el “ojo Escrutador”

Jaime Humberto Hermosillo Delgado más conocido como Jaime Humberto Hermosillo fue un cineasta y guionista mexicano nacido en 1942 en la ciudad de Aguascalientes y radicó la mayor parte de su vida en la ciudad de Guadalajara, donde también falleció. Considerado uno de los cineastas mas controversiales y al mismo tiempo comparado con el trabajo del español Pedro Almodóvar.

Hermosillo creció en el seno de una familia conservadora en la capital del estado. Desde niño asistía a las matinés cinematográficas con sus hermanos de quienes decía “..también eran muy cinéfilos” considerándola la diversión más accesible en esos tiempos. Algunas de las películas que más recuerda de esa época serían El cisne negro de Henry Ling y Dios se lo pague de Arturo de Córdova.

No siempre había sido su sueño el dedicarse al cine, primero en su adolescencia se aventuró en la pintura o como escritor de cuentos.

No es hasta que se inscribe en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) donde comienza a cambiar su interés al cine. Consideraba accesible comprar una cámara de 16 mm y luego ir adquiriendo rollos de película que duraban tres minutos.

Filmando a sus familiares y amigos los fines de semana, se dio cuenta que el lenguaje cinematográfico le permitía expresarse sin la necesidad de una costosa y complicada producción hollywoodense.

De sus trabajos mas importantes podemos encontrar La pasión según Berenice (1975), esta cinta le valió su primer Ariel; Maria de mi corazón (1979) película en la que colaboró directamente con el escritor colombiano Gabriel García Márquez; Doña Herlinda y su Hijo (1985) uno de sus filmes más polémicos, que crítica directamente la homosexualidad en una familia conservadora (Hermosillo era abiertamente homosexual) y por último uno de sus trabajos más trascendentales que sería La Tarea (1991) que consiste en una sola toma larga desde punto de vista de una videocámara de mano, uno de los ejercicios más complejos en estilo. Muchas veces se le calificó como voyerista a Hermosillo, término que no le molestaba, todo lo contrario, calificaba la cámara como “…un ojo escrutador que está tratando de ver más allá de lo que son las apariencias…”.