Publicado en enero 12th, 2021 | por Carlos Olvera Zurita

Safari Urbano: La Lagartija de Mezquite, Rápida y en Peligro

Nos tardamos un poco pero hoy por fin en esta gustada sección hablaremos de un reptil, la lagartija de mezquite, una pequeño animal que habita en la ciudad de Aguascalientes entre las piedras, grietas y árboles, tomando el sol para calentar su sangre.

La Sceloporus Grammicus, chintete o lagartija de mezquite, es una pequeña especie de reptil que se puede encontrar en prácticamente en todos los estados de México, pero principalmente en aquellos donde abunda el árbol de mezquite como Aguascalientes.

El chintete o simplemente conocido como lagartija entre los aguascalentenses es un pequeño animal que mide de 8 a 15 centímetros de longitud desde el hocico hasta la punta de la cola y suele vivir en los recovecos que forman las piedras y árboles donde existan hendiduras en las que pueden esconderse rápidamente.

Existen en general pocas diferencias entre las hembras y los machos pero estos últimos adquieren una marca azul brillante en el vientre que utilizan para llamar la atención del sexo opuesto al mostrar fugaces iluminaciones que en muchas ocasiones no hacen más que tener resultados en los otros machos, provocando peleas que muchas veces terminan en la muerte de uno o ambos contrincantes.

Cuando el ritual de apareamiento de los chintetes sale bien y la hembra queda preñada, tarda aproximadamente ocho meses en dar a luz porque aunque muchas personas no lo saben, muchos reptiles como esta lagartija no ponen huevos sino que son vivíparos.

Si bien los chintetes aún son comunes en las ciudades de México y en particular en Aguascalientes, lo cierto es que los especialistas han visto una disminución en la población urbana debido a que los espacios irregulares como paredes de piedra o arboles de mezquite han ido disminuyendo. Además que cada vez son menos los patios o corrales con vegetación por lo que hay menos insectos de los que estas lagartijas se puedan alimentar por lo que incluso hoy cuentan con un estatus de protección en México bajo la NOM-059-SEMARNAT-2010 por ser una especie silvestre en riesgo.

A esto le tenemos que sumar el hecho de que estos reptiles son asesinados por los humanos que los encuentran en su camino simplemente porque les parecen desagradables pese a que son grandes controladores de plagas que sí pueden ser dañinas; sin embargo tienen un mecanismo de defensa en el que muchos caemos pues tienen la capacidad de hacerse los muertos, aprovechando cualquier distracción para huir a una velocidad insospechada.