Placer Femenino: Abriendo Horizontes

PLACER FEMENINO es un documental de Bárbara Miller, en el que nos presenta a cinco mujeres valientes, inteligentes y determinadas rompiendo el silencio impuesto por sociedades arcaicas y patriarcales y por diferentes comunidades religiosas: Deborah Feldman escritora americana exiliada de la comunidad judía ortodoxa; Leyla Hussein – psicoterapeuta y activista social somalí victima de la ablación-; Rokudenashiko artísta japonesa condenada por obcenidad; Doris Wagner ex monja abusada sexualmente por un miembro del clero y Vithika Yadav activista por los derechos sexuales y de género en la India.

Este documental revela situaciones universales y muestra la lucha exitosa de estas mujeres por el derecho a la autodeterminación de su sexualidad y por una relación igualitaria del placer entre los sexos.

Con una fuerza increíble y una energía positiva, estas cinco mujeres luchan por la liberación sexual y la autonomía de las mujeres. Teniendo que enfrentarse a algo en común, todas han experimentado difamación pública, amenazas y procesamientos, han sido excomulgadas por la sociedad en la que crecieron e incluso recibieron amenazas de muerte.

Este documental nos pone en alerta sobre las libertades fundamentales de las mujeres, especialmente en lo que respecta a sus cuerpos y su sexualidad, y que aún no se han conseguido en muchas regiones del mundo.

El feminismo es un movimiento con más de un siglo de historia -al menos, de forma oficial- y que ha adquirido una visibilidad especial en la era de internet y las redes sociales. La posibilidad de aceptar más voces en la conversación pública ha mejorado nuestro entendimiento de la teoría feminista, y nos ha enfrentado con una realidad que aún no ha happy wheels demo alcanzado una igualdad aceptable con respecto al sexo masculino.

Placer femenino nos recuerda que hay problemas más allá del feminismo occidental, donde los resultados del movimiento son más que palpables, aunque no perfectos. El camino hacia la igualdad, nos dice el documental, pasa por la educación, la concienciación y el debate. Pasa por el aprendizaje y la sororidad, por no olvidar el pasado mientras miramos directamente a un futuro mejor, hacia un nuevo horizonte. Historias como las de Hussein, Yadav o Wagner se cuentan por millones en todo el mundo, y escucharlas es el primer paso para avanzar hacia un mundo un poco más justo, un poco más generoso, un poco más igualitario. Y, definitivamente, un poco más feminista.