El Aleph
863.4B7325a es la ubicación de El Aleph(1949), libro del argentino Jorge Luis Borges, en el que, así como Ficciones(1944), otro libro de su autoría, Borges integra una lista de cuentos que como el desarrolla en el epitafio de la obra, son todos ficción a excepción de dos que ahí mismo especifica.
La manera en la que el autor redacta este libro es muy similar a Ficciones, por no decir que pudiera ser un tomo dos del mismo libro, y los seis años que los separan pudiera ser la razón de que ambos libros se parezcan demasiado. La diferencia que se puede identificar en ambos es que la primer obra utiliza un poco más de juegos de palabras o ese estilo tan barroco que caracteriza al argentino; el segundo, me atrevería a decir contiene muy poco eso además de
tener un tipo de narración en tercer persona constantemente, la primer persona en El Aleph es menos utilizada que Ficciones. Además de una realidad más parecida a la nuestra, es decir, con menos teorías existenciales o radicales en nuestra forma de pensar hace al Aleph un poco más digerible. Aún así el Aleph es una obra singular en la manera de expresar el pensamiento del autor, cada cuento desencadena una historia fascinante si se lee con detenimiento.
El Aleph como cuento del libro de mismo nombre es una historia versificada que lleva la adrenalina de menos a más manteniendo la atención en cada instante, con una expectativa constante de lo que pasará, no por lo cambiante de las situaciones, sino literalmente no sabes qué sigue porque el autor no te dice para dónde quiere ir o el punto que intenta demostrar. La obra en sí hace referencias a sus cuentos pasados, o al menos en los detalles pequeños se puede leer, tal vez podrían ser casualidades, pero la relación de nombres o de objetos pasando de cuento a cuento se siguen presentando, y esto hace que se relacionen cada historia, como si todos los cuentos se encontraran en el mismo universo, al menos así es, se vive en el universo Borgeriano. Lo demuestra claramente en una consecución de cuentos, que desarrolla una historia dentro de otra, así como la mención de temas en cuento que deja pensando “Esto ya lo había leído antes”, tal vez con la intención de volverte loco. Así pues El Aleph es un solo libro en donde sino un cuento está dentro de otro, sí se apoya para dar vida un pensamiento colectivo.
Leer este libro es participar de la historia, no sólo conoces el relato, sino una parte tuya forma parte de él y le da vida. Es un misterio sin resolver que hay que ser conocido para darlo a conocer, como algo que sin ser descubierto no existe y no existirá hasta leerse con la acción que al mismo tiempo lo va creando.
Un libro que tiene mucha relación con Ficciones aunque con un lado menos fuera de la realidad y una escritura poco menos estilística, presenta una forma de escribir muy diferente a otros cuentistas y digno para pasar una buena tarde.
Sobre el autor
Juan Jesús Tlapalamatl Me gusta escuchar música y cantar en todo momento, leer en mis ratos libres y conversar con la gente de cosas sin sentido aparente.
Posts relacionados.
El último verano de Amparo Dávila →
¿Las niñas bien son las siguientes reinas de Polanco? →
Una opera de dos centavos. Reseña de Andrea Santacruz →
