Mi Lección de Zootopia: Ser optimista en un mundo pesimista.

Un mundo donde todos son iguales, no importa el tamaño o el color, todos tienen las mismas oportunidades para cumplir sus sueños y convertirse en lo que uno más desee. Se ha evolucionado y se les consideran animales pensantes, suena muy humano, ¿no?

Me declaro fan de Disney, yo he crecido con su universo y considero que es una de las mejores maneras de crecer y formarte como persona, Zootopia ha sido de las películas más especiales que me ha formado, cuando la vi por primera vez, recuerdo que desde el inicio hasta el fin me deslumbró y me dejó reflexionando bastante.

Es una película cuya animación y universo se han construido de una manera perfectamente estructurada. Los personajes, la ciudad, los ecosistemas, cada detalle, diseño e idea que formaron, están pensados con suma minuciosidad. En la historia se puede notar también la inspiración de películas como Chinatown, El Padrino y 48 horas. Tiene un ritmo rápido, aunque habría que decir que sí llega a haber un punto en que la película se estanca, pero se recupera pronto.

La historia va de Judy Hopps, una conejita que anhela con ser oficial en la ciudad de Zootopia y hacer del mundo un lugar mejor, pero no será fácil para ella por su pequeño tamaño y por ser un animal herbívoro, en vez de un carnívoro como suelen ser los oficiales, pese a todas las adversidades Judy está determinada a cumplir su sueño y aún cuando sus propios padres tratan de disuadirla, se esfuerza el doble y lo logra, surgiendo así la primera oficial conejo.

“En el mundo actual donde aún hay lugar para los prejuicios, intolerancia, racismo, homofobia, pesimismo e incluso odio, Zootopia nos recuerda que las diferencias entre unos y otros son una virtud”

Al momento de ir a la magna y “mágica” ciudad de Zootopia, donde no será más fácil para Judy que cuando estaba en casa, conocerá a Nick Wilde un zorro astuto que tiene pésima reputación y, pese a todos los prejuicios que le inculcaron a Judy sobre los zorros, llegará a formar con él una amistad muy entrañable y juntos trabajaran para resolver un caso donde se dice que están desapareciendo los animales carnívoros en la ciudad.

Cabe resaltar que Judy y Nick tienen una química increíble y te agradan bastante, pero los demás personajes, no son menos, al contrario, resaltan y te agradan igual que los principales.

Si la película tiene un problema está, tal vez, en que la trama es fácil de predecir y es demasiado obvio el mensaje que tratan de transmitir, y sí, finalmente es una película para niños, de tal manera que ellos puedan entenderla mejor, pero esto no lo justifica ya que muchas de las películas de Disney aparte de ser para niños terminan siendo también para adultos y en ellas guardan mensajes que un niño de cinco años no logra captar.

Considero que en el mundo actual donde aún hay lugar para los prejuicios, intolerancia, racismo, homofobia, pesimismo e incluso odio, Zootopia nos recuerda que las diferencias entre unos y otros, más que algo malo es una virtud de la cual deberíamos ser más conscientes, que los prejuicios se construyen a base de la ignorancia y no son buenos porque pueden dañar a las personas. Zootopia me recuerda que si quieres hacer un mundo mejor, debes intentarlo con todas tus fuerzas, tener la determinación y la visión para lograr lo que te propongas. Ser un optimista en un mundo pesimista.