Publicado en septiembre 24th, 2020 | por Alejandro Cerdán
¿Mulán (2020) Logró Traer Honor?
Reseña con ligera cantidad de elementos que pueden ser considerados spoiler.
El clásico animado de 1998 de Disney podrá ser una de las cintas más queridas del estudio por el público occidental, ya sea por su ingenua comedia, los personajes o la pegajosa música. Así como Disney ha trabajado el formato live action en los últimos años, en este caso tocó dar vida a este filme.
En esta nueva perspectiva de la película, dirigida por Niki Caro, ha estado cargada de controversias desde que se anunció la producción, por distintos motivos como lo es eliminar el personaje de Mushu, omitir los números musicales y la incertidumbre que provocó modificar la historia para hacerla más apegada a sus raíces. Adaptada para el público occidental sigue las tradiciones chinas, a través de las edificaciones, términos y acciones en un tono más serio, con nuevos personajes y cero números musicales que generan una nueva cinta para el aclamado clásico, que enmienda su error de 1998.
Esta versión retoma “La balada de Mulán”, que al parecer* fue escrita durante la Dinastía Wei del Norte, es el poema más antiguo (del que se tiene conocimiento sobre la leyenda) en el que se basan novelas, cuentos y filmes de la aclamada guerrera que se hace pasar por hombre y así tomar el lugar de su padre para luchar contra los hunos. Si bien algunas diferencias que podemos encontrar con el poema es que Hua Mulán se va de casa por doce años a la guerra, y en ningún momento su identidad es revelada, esto pasa hasta que ella regresa a casa y sus camaradas van a visitarla; pero aún así mantiene la esencia y fragmentos de la balada.
Sin duda alguna este remake puede ser considerado uno de los mejores live actions realizados por Disney, y es que no hace falta que las canciones estén ahí, porque definitivamente no funcionaría la historia en esta modalidad. Toca el trasfondo de cómo Mulán (interpretada por Liu Yifei) se convierte en guerrera, contando desde su infancia, a mi parecer fue un gran acierto, también que se hablara sobre el qì (chi) que es el flujo de vital energía, el cual ella tiene más desarrollado que otros personajes, pero no tanto como el de Xianniang interpretada por Li Gong (a la que constantemente se le hace referencia como una bruja por ser más fuerte que los hombres), aunque claro, si bien este personaje es recurrente para dar un fuerte mensaje a que las mujeres también deban desarrollar sus potenciales, no pasa pena ni gloria en las casi dos horas de la película. Hay muchos momentos que se sienten planos o que sientes que hace falta más intensidad en las escenas y en las interpretaciones (sobre todo cuando se resuelve el conflicto), mientras que en las batallas están coreografiadas con tanta precisión que no notarás lo mucho que puede durar la escena.
Me gustaría abordar una de las mayores controversias, y es que a nuestra cultura occidental se hace falta un mayor conocimiento sobre la cultura asiática, por lo que se pueden encontrar demasiados comentarios negativos sobre todo el tema del “realismo”, el fénix que aparece como guía espiritual de Hua Mulán no se encuentra visible para todos los personajes, sólo para ella porque proviene de los ancestros, así como también las acrobacias son exageradas porque así es como en China se retratan en sus propios dramas, esto quiere decir que es parte de su cultura esos movimientos exagerados. Esto me lleva a hablar en términos de producción, en la mayoría de momentos logras sentir que estás en alguna parte de China, las edificaciones son impresionantes, tal como respetan el estilo. En cinematografía vemos como se adapta a una estética, y los movimientos de cámara son sutiles, y claro una maravilla de paisajes que se logran apreciar, así que visualmente es algo increíble. Aunque pudo tener un guion más sólido y más profundo para la historia, así como para el desarrollo de varios personajes. La música instrumental que la acompaña es un deleite épico para escuchar, en varias ocasiones podrás escuchar instrumentos como el Guqin, el Dizi (flauta de bambú) y sentirte en la época, tal como lo son en dramas históricos chinos.
Claramente es una historia diferente a la que el estudio nos presentó en 1998, y podrás ver muchos guiños a aquella versión en sus diálogos o en sus tomas, así como también tiene varios guiños no mencionados a la balada de Mulán (por ejemplo, el caballo negro con el que regresa a casa). Tiene un mensaje claro, y se muestra el compromiso de mostrar que Mulán no es una mujer romántica al estilo de otras mujeres Disney, ella es una guerrera con pilares sólidos, con fuerza que traerá honor a su familia.
*Al parecer, porque existen distintos datos sobre años en los que se cree que fue escrito.