Razones por las que Siempre hay que Creerle a las Víctimas de Violencia
1.- Porque el porcentaje de denuncias falsas es muy bajo: Según la ONU Mujeres México, en los países donde se ha medido el porcentaje de denuncias falsas es menor al tres por ciento. Usar el cuento de “es que ahora cualquiera puede hacer una denuncia falsa”, es ignorar por completo el hecho de que la mayoría de las denuncias son reales; por lo que, al concentrarnos en un porcentaje tan pequeño, invisibilizamos el problema sistemático de no creerle a las mujeres.
2.- Porque la víctima no gana nada: Ni fama, ni atención, ni siquiera consecuencias. La víctima no logra tener nada después de la mayoría de las denuncias. A las víctimas, las acosan y las llaman “locas” u “oportunistas”, mientras que los victimarios realizan videos o escritos con disculpas bastante pobres, y continúan con sus vidas. La víctima no tiene razones para mentir.
3.- Porque el proceso de cada mujer es diferente, y está bien: “¿Por qué no lo dijo antes?”, “¿Por qué no fue inmediatamente a reportarlo?”, “¿Por qué hasta ahorita cuando es famoso?” Estas son algunas preguntas que usualmente se utilizan para deslegitimizar a las víctimas, por el tiempo en el que se hace la denuncia.
Hablar desde el dolor y a través del trauma no es sencillo, e implica un esfuerzo y trabajo a gran escala. Cada persona que lo vive, encuentra distintas maneras de procesarlo. El tiempo que le tome a la víctima llegar a tal punto de realizar una denuncia, no es asunto de nadie más.
4.- Porque la violencia sexual sigue siendo usada como comedia: Reírse acerca de las violaciones no hace superior a nadie, no significa que se tenga humor negro, que lo haga “alivianado”, ni nada. Lo único que significa es que es incapaz de empatizar con los miles de personas que han sido, son y, desgraciadamente, seguirán siendo víctimas de violencia sexual.
5.- Porque nunca ha sido un debate, y la voz de algunos sigue siendo más importante que la de nosotras: Una mujer cuenta su historia de abuso y la gente pide evidencias. Un victimario sube una historia o un estado de Facebook diciendo que “yo no fui”, y la gente simplemente le cree.
Porque para ella, el alcohol es la causa de lo que le pasó. Para él, es la excusa.
Basta de creernos los discursos de que estamos en igualdad de circunstancias cuando, en realidad, continuamos viviendo en una sociedad patriarcal que insiste en responsabilizar a las mujeres por la violencia que sufren.
Sobre el autor
Andrea Márquez Me gusta la lectura, escribir, pasear de noche e ir a cafés. Las obras de teatro, películas y conferencias de libros. La literatura inglesa, música, adaptaciones cinematográficas y el frío.
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